viernes, 15 de marzo de 2013

HADA (Sin Hache)

El empedrado de la calle
se amolda a mis pies,
cien puntadas de tanto caminar.
Algo de beber, por favor alguien diga
dónde puedo comer.

Aceite recién exprimido,
queso fundido,
un olor muy conocido.

Mis pies me llevaron,
unos ojos me atraparon,
envuelto por un manto de dulces cantos.

Vuelas por ahí y por allá,
mirarte, tan solo contemplarte,
es algo que me fuerza a hablarte.

Conocer es difícil, mas
reconocer es "casi imposible",
entonces me miraste tu.

Como si fueran esclavos, mis ojos
te observaron, dictadora de la vista.

Polvo de estrellas,
espuma de mar,
se oyen gaviotas cantar.

Y las palabras salen solas,
la conciencia se fue de parranda y a mi cuerpo
le viene un repentino mal de Parkinson.

Nervios recién exprimidos,
cerebro fundido,
hoy el dolor es desconocido.

Antes de la retirada,
antes de la cascada,
mírame una vez más... Hada.

1 comentario:

vitisa dijo...

Muy bonito, gracias! Esto me inspira a seguir escribiendo!