Cerré los ojos y dejé que de
mi cerebro afloraran todo tipo de
circunstancias rotas con anhelos de ser
reparadas.
Conservé durante días la mirada que me
regaló aquel punto de luz suspendido en el
cielo, pídeme un deseo.
Una carcajada rezonó en aquella plazoleta.
La contradicción juega un papel inmortal y con
toda la fe que me quedó pregunté por un sueño
hecho polvo.
Los días se hacen una eternidad,
un estado con diminutos brillos de centella
congrega toda mi atención.
¿Cómo pude crear semejante decisión?
Explotaron su luz como la mentirosa agua del desierto,
mi futuro es incierto.
Las han colocado;
Las han condenado;
Observan eternamente,
líbrense de mi mente.
Son puntos; puntos fantasma que no
sé qué hacen aquí observándome sin parar.
Murmullos sin cesar no hacen más que incitar
a desear sueños que no son capaces de entregar.
Maldita luz.
Malditas bellas.
Malditas sean...todas las estrellas.
1 comentario:
me gusto me gustooo!! muy buenoo
aunque un poco pesimista.. com que no te gusta soñar, puede ser??
que tienes en contra de los sueños? si no sueñas, no tienes metas, si no tienes metas.. a que vienes al mundo? es una opinion personal :)
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