martes, 31 de agosto de 2010

INCEPCIÓN:

Mis párpados cubrieron mi
vista y aquella forzada sonrisa
se fue con el suspiro de la brisa.

Mis lentes se trasladan
a mi mente y mi vivir
se transportó al sentir.
Quiero partir.

El negro que cubría
a la gente se tiñó
con aquellos colores
de la mente.
Mi cuerpo anestesiado
no hace más que
observar asombrado.
Lejano testigo de lo que
está pasando.

Vivo dentro de mí, pero
ahora estoy fuera de todo
existir.
La vida va cambiando
a medida que voy imaginando.
Esto está creando.

La dulzura que por mis
humos corría se quebra
con una sensación sombría.
Todo cambia y todo gira,
aún con el más leve llanto
o sonrisa.

Las figuras se desfiguran
y los rayos alumbran
un lugar que vuelve a
su final.
Es tiempo de estar.

Una mañana entre
almohadas se avecina,
en mí entró la morfina.

lunes, 30 de agosto de 2010

FLORES:

Un pétalo.
Diez pétalos.
Una flor.
Mil amores.
Una rosa.

Exclusiva bella.
Un millón de orquídeas y
mi emoción se convirtió
en girasol y tu alma brilló
como el astro mayor.
La vainilla envolvió tu
cuerpo y mi nariz creó
tu silueta.

Blanca la rosa se tiñó
por la pureza de este amor.
Roja quedó la rosa,
por la pasión de tu corazón.

GERVASIO AL 94%:

Corrí por el espacio
y, muy despacio,
llamé a la puerta de Gervasio.
Aquella jamás se abrió;
El viejo y andrajoso ermitaño
no tenía el mismo humor de antaño.

Más de alguna vez
compartí una taza de café,
pero a medida que avancé...
fui perdiendo mi fe.
No sé qué fue...
La única idea que logré
esclarecer de este profundo
atardecer fue la oscuridad
que me tortura sin piedad en
esta eternidad que parece no
terminar.

Luego de este loco momento,
volví a tocar de nuevo y
entonces escuché un estruendo.
Una voz seguía repitiendo que
este no era mi momento.

Forcé la cerradura con
dura ternura y cuando
la noche ya estaba oscura,
vi aquella figura que no olvida
su tortura.

Andrajoso y desteñido,
vi morir a un viejo
que en su vida
nunca ha tenido
ese dolor que tanto había
temido.

domingo, 22 de agosto de 2010

ASIENTO

Antes de ayer sonreí para
pasado mañana;
Sentado libro con libro
espero en mi cuarto.

La ventana proyectó aquellas
imágenes que me dan vida,
existo.
Reflejos luminosos ante dos ojos
turnios que no ven.

Sentado en una silla
descargo aquel infinito letargo
que viene y va de vez en cuando.
El vidrio sigue proyectando aquello
que estoy soltando.
La tarea se volvió forzada cuando
recuperé la conciencia.

Tengo ánimos de no querer y
sueños de no sentir.
Lo único que interesa es poder abrir,
por fin.

Caminar por sueños se volvió mi
peor destino y no consigo un equilibrio
con amargos martirios.
Un día, tal vez...logre proyectar
a todos aquellos que fueron dañandos, mas
los vidrios son pocos y las manchas muchas.
Hay que sentirse de plumas.

El día después de pasado mañana, que en unos
momentos más se cumplirá, reiré convencido
que estuve tan abajo que hoy me siento alto.

martes, 10 de agosto de 2010

MALDITA ESTRELLA

Cerré los ojos y dejé que de
mi cerebro afloraran todo tipo de
circunstancias rotas con anhelos de ser
reparadas.

Conservé durante días la mirada que me
regaló aquel punto de luz suspendido en el
cielo, pídeme un deseo.
Una carcajada rezonó en aquella plazoleta.
La contradicción juega un papel inmortal y con
toda la fe que me quedó pregunté por un sueño
hecho polvo.

Los días se hacen una eternidad,
un estado con diminutos brillos de centella
congrega toda mi atención.
¿Cómo pude crear semejante decisión?

Explotaron su luz como la mentirosa agua del desierto,
mi futuro es incierto.
Las han colocado;
Las han condenado;
Observan eternamente,
líbrense de mi mente.

Son puntos; puntos fantasma que no
sé qué hacen aquí observándome sin parar.
Murmullos sin cesar no hacen más que incitar
a desear sueños que no son capaces de entregar.

Maldita luz.
Malditas bellas.
Malditas sean...todas las estrellas.

domingo, 1 de agosto de 2010

EFECTO VIENTO

Cuando llegue el minuto, la
noche pasará a ser estrellada y
aquellos besos de luz que se muestran
hoy en el panorama provocan la mente
de un pequeño número de gente.

Voces se propagan a través de un mar
gigante. Parece muy interesante, pero en
el afán de refrescarme tuve que silenciarme
para tratar de escucharles.

No he logrado conectarme con la voz de las
voces así que en un torbellino de gritos absorbió
mi cantar y se la llevó hasta un ilusorio horizonte.
Ahora soy lo que fui.

Estoy antes de conocerme y por mucho que me
esfuerce por hacerme notar, nunca lo volveré a
lograr.
En mis propias palabras he creado un fantasma.

La luz oculta mi alma, así es como el día transcurre
con calma.
Cuando la sombra se apodera de la tierra es entonces
cuando aquella piedra se vuelve fiera.
La oscuridad es el idioma que domino y el silencio es
la vía con la que me muevo.
El zumbido del viento.
Aroma de la brisa.
Estoy mudo y sin sonrisa.

PARTO

Está oscuro aquí.
¿Dónde estoy?
Siento movimiento.
¿Qué estoy moviendo?

Un breve y potente lapso de ignorancia
se apodera de mí.
No sé qué es esto; me siento pesado y
estoy en el mando de algo, un ente que se
dice viviente.

Una delgada línea de luz aumenta su grosor y
encandila cada rincón.
Una fuerte ráfaga sacude a esto al minuto
en que tuve que cruzar aquella línea.

Del otro lado...oscuridad.
No comprendo.

Una chispa rezonó en el espacio...estoy en el
tiempo.
Dí una orden a este mecanismo perfecto; entonces
ví y sentí lo que llaman mundo.

Me he visto en el espejo repetidas veces y no logro
reconocerme, soy capaz de coordinar una serie de
extremidades para que realicen una actividad de
manera brillante.
Asombroso.

Me clavé una espina en un sitio de este lugar y
brotó una especie de líquido...con sabor a metal.
Una sensación fuertemente desagradable me invadió.
¿Es esto lo que esperaba ver?

DIMENSIÓN LANUDA

Estuve tejiendo un par de ideas,
los palillos estaban a mal traer y el
final parece abstracto y con unos puntos
que son difíciles de descifrar.
Un breve instante...

Oigo varias voces nuevas, algunas que antaño no hablaban,
hoy hacen estrgagos en un trazo de tela.
Mis manos han sucumbido ante largos trozos de lana.
Sin pestañar, he quedado bajo el calor de esta cosa amorfa.
Cuento las horas...

De a gotas me voy perdiendo.
Rápidamente caí en un vórtice espacial, un hoyo
negro que lleva a otra dimensión.
Su poder de absorción era colosal, no pude resistirme,
el tejido me impedía cualquier acto de rebeldía.
Aquí no es...

Un tiempo en medio del universo en donde aquel tejido
se extendió por toda la eternidad, ni el tiempo se salva
de sus lanudos brazos.
Aquello que veo...

Una opaca figura lanzó un grito a la dimensión,
y brilló en cada rincón que creé, aniquilando cada
tejido del vórtice, a mi...no me vio.
Los agonizantes trazos se esparcieron en el momento,
a mi...me vio.

La simbiosis se consumó, comenzó a crecer con el
absorbido poder que la luz creyó exterminar...