sinfonía de colores rebotando.
Los ángeles saben que no hay nadie esperando.
Flores dormían,
espinas crecían,
lágrimas por la roca corrían.
El azul ha vuelto al mar y el
amarillo comienza a brillar.
Ya no hay lugar para que esos
ojos verdes vuelvan a amar.
Mariposas vuelan en el suelo,
no quedan colores en el cielo.
La tristeza no tiene consuelo,
con el tiempo, llegan a un acuerdo.
Aparece un recuerdo.
Los ecos se pelean el vacío;
La lucha la gana un canto sombrío.
Palabras hablan fuera de gravedad,
hay vida en la soledad.
El amarillo ha dejado de brillar.
La mar se ha vuelto a secar.
Una sinfonía de colores deja de tocar.